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Luego del estreno de “A Film Unfinished”, el documental de Yael Hersonski sobre el Gueto de Varsovia, el crítico Alan Pauls habló con el público sobre la película, sobre su valor y sus planteos más inquietantes.
El sábado 3 de diciembre a las 18 hs., con la última proyección del filme 24 City de Jia Zhang Ke (China, 2008) culmina el ciclo de cine y política que el crítico y escritor Alan Pauls presentó en Proa desde el mes de julio.
24 City es una de las realizaciones asiáticas más personales y desafiantes de los últimos años; Ke, su director, es una figura cultural resonante de la China continental. La película elegida por Pauls recurre a una modalidad narrativa deliberadamente confusa, en la que las estrategias documentales y la ficción tensan una trama dramática: el devenir del sistema económico chino, miniaturizado en historias de vida atravesadas por un giro imprevisto: el cierre de una fábrica y el establecimiento en ese predio de un complejo habitacional de lujo.
Firmes en su primera persona, los testimonios de 24 City son cuerpo y voz de aquello que las películas anteriores del ciclo postularon de manera más “teórica”: capitalismo y dogma comunista.
Noticias de la Antigüedad ideológica: Marx – Eisenstein – El capital (Alemania, 2008) el denominado “Capital de Marx filmado por Alexander Kluge”, despertó en julio y agosto el interés de cientos de asistentes. Organizadas por el Goethe Institut y Proa, las funciones del filme de Kluge (que fue proyectado por primera vez en la Argentina en versión completa, respetando las nueve horas y media de duración original) impusieron su lógica y como en un “pase de postas” inevitable, determinaron la segunda elección de Pauls para el programa: la presentación en septiembre y octubre de Autobiografía de Nicolae Ceausescu (Rumania, 2010) de Andrei Ujica, acompañada de Videogramas de una revolución (Alemania, 1992) de Harun Farocki y Ujica.
Así, desde la indagación exasperante de restos marxistas en la actualidad que Kluge emprende en “su” capital, hasta la puesta en práctica traumática de esa posibilidad -la legendaria y “eterna” dictadura del rumano Ceausescu, contada elocuentemente por las imágenes oficiales del gobierno y las imágenes oficiales de la rebelión popular que lo derrocó 25 años después de su ascenso al poder – el destacado ciclo de Alan Pauls fue creciendo en convocatoria, aportando un material central para comprender la insistente, extraña, renovada relación de la cinematografía contemporánea con los grandes relatos políticos.
En cada caso, Alan Pauls elaboró notables textos. Los sábados, el Auditorio de Proa esperó su presencia: cada uno de sus prólogos dinamizó las proyecciones e incentivó el deseo del público. Proa cierra una experiencia enriquecida por la selección de Alan Pauls, una voz crítica siempre reveladora.
Cuatro únicas funciones
Sábados 12, 19 y 26 de noviembre / 3 de diciembre*
17.30 hs. Presentación de Alan Pauls
18.00 hs. 24 City
* POR RAZONES PERSONALES, EL SR. ALAN PAULS NO PODRÁ PRESENTAR EL FILME EL SÁBADO 3 DE DICIEMBRE.
Admisión: $15
Informes y reservas: auditorio@proa.org / (5411) 4104-1000/1001
Niños desde 9 años, acompañados por adultos
Con la colaboración de la Embajada de Francia en Argentina
Aunque las hojas sean muchas, la raíz es sólo una. A través de los mentirosos días de mi juventud mecí al sol mis hojas y mis flores. Ahora puedo marchitarme en la verdad.
W.B. Yeats
Unánimemente elogiado, el filme chino 24 City (2008) es una de las últimas realizaciones de Jia Zhang Ke, considerado el director emergente más radical de la cinematografía asiática. Un registro descarnado de las transformaciones sociales de la actualidad china, a mitad de camino entre el documental y la ficción. El lujo y la marginación, la tradición milenaria y el afán capitalista: 24 City narra un proceso de sincretismo cultural y económico que desnuda con agudeza la situación de China a partir de un hecho puntual: el cierre de una fábrica de aviones. Un relato polifónico de ocho personajes que representan tres generaciones.
24 City culmina el ciclo de cine presentado por el crítico y escritor Alan Pauls. Tras la proyección de El capital de Marx filmado por Alexander Kluge, y del tándem de documentales sobre el dictador rumano Nicolae Ceausescu (Autobiografía de Nicolae Ceausescu de Andrei Ujica, y Videogramas de una revolución, de Harun Farocki y Ujica), Proa Cine cierra una programación estructurada en torno al vínculo entre la cinematografía contemporánea y la política.
24 CITY Título original Er shi si cheng ji
China, 2008. 107 minutos. Color Dirección Jia Zhang Ke Guión Jia Zhang Ke, Zhai Yongming Intérpretes Joan Chen, Lv Liping, Zhao Tao
“24 CITY” POR ALAN PAULS
En la prehistoria hay una película que nunca llegó a nacer. Se llamaba La salida de la fábrica, igual que el corto con el que los hermanos Lumière inauguraron la historia del cine. Al menos en el papel, el proyecto narraba, encarnándola en los destinos de dos ex compañeros de escuela del director —obreros con fe a fines de los ’80, desempleados sin futuro en los ’90—, la transición brutal entre la China de la economía planificada y la de la libertad de mercado.
Jia Zhang-Ke lo descartó por simplista: que el dinero vuelve malvados a los hombres no podía ser todo lo que tuviera para decir sobre el asunto. Pero el proyecto tuvo la supervivencia sigilosa que a menudo tienen las cosas interrumpidas antes de tiempo. De hecho ronda y se hace ver velado, como un pentimento, en la película que Jia terminó haciendo seis años más tarde, 24 City. De La salida de la fábrica, 24 Cityy retoma no sólo el tema —los efectos traumáticos de la mutación económica, social y cultural más singular de la historia contemporánea— y el tono —la elegía— sino algo quizá más particular, más complejo, que de algún modo había quedado cifrado en aquella alusión original a los hermanos Lumière: el enigma de la relación íntima, histórica, entre el cine, la pulsión documental, el mundo del trabajo y ese horizonte de posibilidades que llamamos ficción.
Es de hecho una inversión de esa escena mítica —la salida de los obreros— la que abre 24 City. Los obreros, uniformados con su ropa de trabajo, entran en bicicleta a la fábrica. Pero entran no tanto para trabajar —los tres o cuatro que Jia filma en plena labor, aislados, aparecen casi como “artistas del trabajo“, un poco a la Kafka, repitiendo los gestos de producir para la mirada de un público de museo— como para asistir a la ceremonia oficial que decreta su propia defunción. Entran al lugar que durante cincuenta años fue todo para ellos: trabajo, residencia, educación, ocio, vida comunitaria. Entran y se acomodan en el auditorio de la fábrica en orden, con esa disciplina que el trabajo aprendió de la milicia, y cantan y aplauden lo que puede ser la oportunidad más jugosa o la peor de las tragedias: la venta de la fábrica a una compañía de desarrollo inmobiliario, la China Resources, que la tirará abajo para construir un gigantesco complejo residencial y comercial bautizado —según un viejo poema chino— 24 City.
Un proyecto es reemplazado por una película; una vieja planta industrial aeronáutica por una vertiginosa urbanización. ¿Qué es metáfora de qué? Difícil saberlo. Lo cierto es que esa lógica del desalojo está en el corazón de la película y la anima y la vuelve desesperada y fúnebre como un requiem. Jia no se engaña: la palabra “transición“, tan frecuente a la hora de describir el devenir sui generis de la sociedad china, no es más que un eufemismo para nombrar procesos que sólo la jerga militar se atreve a nombrar con crudeza: ocupación, posesión, expulsión. Los nueve testigos que Jia convoca para conjurar la fábrica sentenciada son eso: expulsados. Expulsados de un ecosistema —la fábrica— pero también, y sobre todo, de un tiempo, una época para la que esa clase de lugares tenían significado y valor y encerraban una promesa. Atraviesan medio siglo de utopía productiva comunista, abarcan cuatro o cinco generaciones y tocan toda la jerarquía de puestos fabriles, desde el operario raso hasta el maestro industrial, pasando por el jefe de seguridad o el control de calidad.
¿Historia oral? Sin duda, porque Jia sobre todo los hace recordar, hablar, contar, como si el lenguaje fuera la única reliquia del Mundo Fábrica capaz de conservar el aura de lo que está perdiéndose y, a la vez, sobrevivir a la demolición. Pero también historia coral, sembrada de contrapuntos y hasta de disonancias. Porque la historia también tiene que crujir, hacer ruido. Sólo que en 24 City el cortocircuito no es entre historias (los relatos de vida de fábrica son tan idiosincráticos que no sabrían cómo contradecirse). Es entre registros: entre la verdad documental de un obrero que se reencuentra con el maestro que lo formó, por ejemplo, y la ficción —ficción al cuadrado— de una actriz que hace de obrera y contempla por tv la película de los años ’70 que la consagró como actriz, de donde salió el apodo (“Pequeña Flor“) que dice haber llevado siempre en la fábrica. Jia es tramposo: devela que trabajará con actores cuando incluye sus nombres en los créditos de apertura, pero intercala los momentos de ficción como quien deja caer un billete falso entre verdaderos.
¿Cómo distinguir a unos de otros? Todo está en el cuerpo. Mientras los personajes tienen “historias“, los obreros —los expulsados de la fábrica: a la vez sus hijos, sus héroes, sus historiadores— son los que tienen cuerpo, el cuerpo que les esculpió el trabajo en la fábrica, el cuerpo quieto y ya un poco mítico que Jia retrata en silencio, en largos planos fijos, dejando que el tiempo actúe sobre él y lo haga vibrar todavía un poco, esperar y desear todavía algo más.
Alan Pauls
Dijo la prensa: Fundación PROA – Ciclo Alan Pauls: 24 City. Film Focus. 26.10.2011 “24 City” de Jia Zhang Ke. Cine Búho. Noviembre 2011 Proa Cine estrena el film “24 City”. Escribiendo Cine. 4.11.11 Todo un símbolo de los cambios en China. Por Diego Brodersen. Página 12. 18.11.11 Los obreros chinos, de la utopía a la calle. Por Silvia Naishtat. Clarín / iEco. 19.11.11 Otras imágenes. Agencia Télam / Terra / El Comercial. 22.11.11
Cuatro únicas funciones
Sábados 17 y 24 de septiembre / 1º y 8 de octubre
Admisión: Autobiografía de Nicolae Ceausescu: $25
Videogramas de una revolución: $15
Informes y reservas: auditorio@proa.org / (011) 4104-1000/1001
Niños desde 9 años, acompañados por adultos
"Autobiografía de Nicolae Ceausescu". Dir. Andrei Ujica. Rumania, 2010. 180'
Alan Pauls, crítico y escritor invitado por Fundación Proa, seleccionó para los meses de septiembre y octubre dos de las experiencias documentales más intensas de los últimos años: Autobiografía de Nicolae Ceausescu (2010), del realizador rumano Andrei Ujica, y Videogramas de una revolución (1992), codirigida por Ujica y el alemán Harun Farocki. Luego de la proyección de El juicio en Nüremberg en el marco del BAFICI y del estreno de Noticias de la Antigüedad ideológica: Marx-Eisenstein-El capital, de Alexander Kluge, Alan Pauls vuelve a aportar su mirada crítica en esta selección.
En palabras de Pauls, Autobiografía y Videogramas son “películas hermanas, plano y contraplano de un proyecto que articula las imágenes de la Historia y la historia de las Imágenes como pocos en el cine documental contemporáneo”.
Autobiografía de Nicolae Ceausescu, construida exclusivamente a partir de registros fílmicos oficiales y de propaganda, narra la génesis, consolidación y alcance del régimen político liderado por Nicolae Ceausescu durante 25 años en Rumania, desde su ascenso al poder en 1964 hasta su caída y ejecución, en diciembre de 1989.
Surgido de un riguroso trabajo de archivo -más de 1.000 horas de grabaciones originales-, Autobiografía organiza una trama que, según el director, constituye “una obra de ‘ficción’ con personajes históricos reales”.
La historia prosigue en Videogramas de una revolución, resultado de un trabajo de recopilación y selección de imágenes de videoaficionados sobre el secuestro y muerte de Ceausescu y su esposa Elena durante las movilizaciones populares de 1989. Los directores Farocki y Ujica contraponen estas múltiples filmaciones de los ciudadanos con la narración oficial de los mismos sucesos transmitida por televisión.
Con el apoyo del Goethe-Institut de Buenos Aires y el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI), Proa Cine presenta Autobiografía de Nicolae Ceausescu y Videogramas de una revolución en cuatro únicas funciones, los sábados 17 y 24 de septiembre, y 1º y 8 de octubre.
"Autobiografía de Nicolae Ceausescu". Dir. Andrei Ujica. Rumania, 2010. 180'
AUTOBIOGRAFÍA DE NICOLAE CEAUSESCU Título original Autobiografia lui Nicolae Ceausescu
Rumania, 2010. 180 minutos. Color – B&N Dirección / Guión Andrei Ujica Edición Daba Bunescu Producción Velvet Moraru
Icon Production www.the-autobiography.com
VIDEOGRAMAS DE UNA REVOLUCIÓN Título original Videogramme einer Revolution
Alemania, 1992 106 minutos. Color – B&N Dirección / Guión Harun Farocki, Andrei Ujica Edición Egon Bunne Producción Harun Farocki
Harun Farucki Filmproduktion, Bremer Institut Film / Fernsehen Produktionsgesellschaft Locutor Thomas Schultz
"Videogramas de una revolución". Dir. Harun Farocki/Andrei Ujica. Alemania, 1992. 106'
UJICA POR ALAN PAULS
Autobiografía de Ceausescu y Videogramas de una revolución son películas hermanas, plano y contraplano de un proyecto que articula las imágenes de la Historia y la historia de las Imágenes como pocos en el cine documental contemporáneo. Verdaderos prodigios del found footage, no hay en ellas una sola imagen original, creada por sus directores. Todas estaban ya hechas, a la espera de rescate y redención, perdidas en sótanos de organismos gubernamentales, en el polvo de archivos cinematográficos y canales de televisión, o encerradas en casetes grabados por camcorders de aficionados. Ahí las fueron a buscar Andrei Ujica y Harun Farocki. De ahí las exhumaron y montaron para reconstruir una de las epopeyas que el sueño comunista le dio al siglo XX: el nacimiento, la larga vida y el derrumbe estrepitoso de la dictadura de Nicolae Ceausescu.
Realizada por Ujica y Farocki a partir de materiales de la TV rumana y cientos de grabaciones caseras, Videogramas… (1992) compacta en un jadeante thriller polifónico la rebelión popular que en diez días de diciembre de 1989 desalojó a los Ceausescu (Nicolae y Elena) del balcón del Comité Central del Partido Comunista para juzgarlos y entregarlos al pelotón de fusilamiento. Como si fuera una precuela, Autobiografía… (2010), de Ujica, empieza casi donde termina Videogramas, con la imagen de los Ceausescu ya destronados, a punto de comparecer ante el tribunal militar que los condenará, pero da marcha atrás en el tiempo —como si, ante el trance que se avecina, la pareja viera desfilar en tres horas de flashback su vida de déspotas en ejercicio— y revisa en orden cronológico, con imágenes excavadas del acervo propagandístico del régimen, veinticinco años de una dictadura a la que Occidente le había prestado muy poca atención.
En un caso (Autobiografía…) se trata de un fenómeno multidimensional —un régimen comunista en el poder— documentado desde un solo punto de vista, el del propio régimen, que se filma a sí mismo con la misma avidez —y un poco más de espectacularidad— con que una familia pequeñoburguesa se perpetuaba en home movies insignificantes. Desfiles, inauguraciones de fábricas, bienvenidas a mandatarios extranjeros, fiestas patrias, discursos, misiones al extranjero: nada más representativo y pomposo, nada más banal. ¿Es posible ver tres horas de propaganda oficial sin bostezar ni indigestarse? Ujica prueba que sí, y prueba incluso algo más improbable: que esa maratón de rituales multitudinarios y fastos a ritmo marcial puede hacer nacer en el espectador algo muy parecido a una revelación lúcida. Contradecir al poder —interrumpir la continuidad de su discurso— es la manera clásica que conocemos de ser críticos. En Autobiografía de Ceausescu, Ujica demuestra que hay otra: dejarlo hablar solo —hasta que su discurso se reduzca a lo que es: un monólogo estéril, autocomplaciente y kitsch, que envejece y se descompone en público.
En el otro (Videogramas…) se trata de un fenómeno único —una revuelta popular— acechado desde puntos de vista múltiples: los miles de video-ojos con que los ciudadanos de Bucarest salieron a registrar la crisis terminal del régimen. Minuto a minuto, como si construyera un vivo après-coup, Farocki dirige el coro de esas miradas menores para rearmar la secuencia de hechos históricos e interrogar sus vacíos más ínfimos. ¿Por qué Ceausescu vacila en medio de un discurso? ¿Qué ve, más alla del balcón, que lo hace balbucear? ¿De dónde vienen los disparos que se escuchan fuera de cuadro? Si Ujica se abstenía de retrucar al discurso oficial, Farocki procede al revés: repone siempre el plano que falta, restituye la imagen alternativa o complementaria, el lado B que pone en cuestión el discurso único y hace avanzar, al mismo tiempo, el vértigo de la intriga revolucionaria.
En cierto sentido, Autobiografía de Ceausescu y Videogramas de una revolución son películas post históricas. Creen en la Historia más que nunca, pero la sorprenden en un momento de mutación total, cuando el target de las masas alzadas no son los Palacios de Invierno sino las centrales de televisión, los archivos de imágenes, las cámaras, los micrófonos: todos los instrumentos de ver y registrar que, lejos de contentarse con reflejar la Historia, se ponen por fin a hacerla.
Alan Pauls
Dijo la prensa internacional: “Un documento de implacable auto-glorificación que el propio Ceausescu difícilmente podría haber igualado. La película, alimentada puramente de registros propagandísticos empalagosos de un personaje construido –muchos de ellos, grabados por encargo de Ceausescu–, es, a la vez, atractiva y repulsiva. (…) Contrariamente a este exceso, Ujica ofrece un recurso elocuente y conmovedor: un silencio que suele interrumpir la habladuría de los políticos y estadistas mientras el rodaje continúa. En estos intervalos mudos –más de la mitad del filme de tres horas de duración, a veces, acompañado por una musicalización siniestra– Ujica nos invita a mirar las imágenes fantasmales de quien supo detentar el poder y a reflexionar sobre los peligros de la naturaleza efímera de la arrogancia y las verdades históricas y personales que no fueron documentadas.” Tony Pipolo. Artforum
“Es imposible que la Autobiografía de Nicolae Ceausescu sea el monumento que el ex dictador rumano hubiera producido en su propio honor. Entre otras cosas, no tiene un final feliz, al menos para él y su esposa, Elena, ejecutados en la Navidad de 1989. Sin embargo, en muchos aspectos, Ceausescu resulta ser el autor de este documental brillante en el mismo grado en que lo es su director, Andrei Ujica, quien se sumergió en las más de 1.000 horas de filmaciones de propaganda estatal, noticieros oficiales y películas caseras para crear una hazaña cinematográfica que sigue el ascenso, el reinado y la severa caída de este sujeto. (…) Es una especie de acto enrarecido de ventriloquia. Utiliza un cuerpo –aquí, el Ceausescu público y privado– como una manera de revelar la verdad acerca de otra vida, en este caso, la de un país bajo el yugo totalitario.” Manohla Dargis. The New York Times
“Como una acusación épica sobre la manipulación mediática, este documental de vanguardia da su golpe de gracia cuando la cámara finalmente exige una rendición de cuentas, dejando al déspota en desgracia mirando fijo la lente, y al abismo de la historia devolviéndole la mirada.” David Fear. Time Out New York
“Percibimos los documentales como registros de la verdad; esto sucedió, la cámara lo grabó. Autobiografía de Nicolae Ceausescu es el registro de una mentira. Sí, esto ocurrió, y sí, la cámara lo grabó. ¿Pero por qué sucedió y cómo? ¿Y qué pasaba fuera de cámara? Por su inusual estructura, la película no lo dice. Pero los espectadores atentos se darán cuenta de que esta “autobiografía” presenta una visión incompleta de la historia. (…) En cambio, vemos la formación de las pequeñas grietas en la fachada de un mundo de fantasías cuidadosamente construido por Ceausescu. Las multitudes comienzan a disminuir en sus apariciones públicas. Todavía lo aplauden, pero no tan intensamente. Algunas de las secuencias son simplemente surreales. En una visita a California, se chocan dos realidades fabricadas cuando Ceausescu recorre el set de filmación de los Universal Studios. Él parece estar atento, tomando notas mentales.” Matt Singer. IFC News
“Ujica ofrece abundantes imágenes públicas de su personaje con la esperanza de que, luego de presenciarlo en tantos discursos y posando en tantos eventos celebrados en su nombre, comenzará a emerger un atisbo del hombre tal como realmente fue. El intento da lugar a una clara experiencia de inmersión. Sería erróneo decir que Ujica se compadece de Ceausescu, pero sin dudas es consciente de lo bizarro que fue el día a día de este hombre. (…) Autobiografía de Nicolae Ceausescu trata tanto acerca del pueblo como del dictador; Ceausescu es intrigante por sí solo, pero el hecho de que en su modo de ser resida un reflejo de su pueblo lo convierte en una figura tan enigmática. Al mostrar tan pocas veces a ese pueblo, Ujica lo presenta de la misma manera en que Ceausescu parece concebirlo: seres extraños cuya única interacción real con el líder era vitorearlo cada vez que aparecía ante ellos. Nunca vemos a un rumano o rumana en solitario; siempre son parte de una multitud, ya sea reunida en la calle para escuchar a su líder hablar o alrededor del televisor para hacer lo mismo. Vamos a echar un vistazo a estos discursos primero desde la perspectiva de la multitud, y luego la película recorta esta mirada a la de una familia en su living o trabajadores en una fábrica viendo ese mismo discurso. Es una técnica de 360 grados notable por el gran volumen de imágenes montadas, pertenecientes al archivo nacional de Rumania, y por la precisión artesanal con la que fueron editadas.” Michael Nordine. Slant Magazine
“Ujica aísla la vanidad de su personaje, ya sea cuando sonríe antes de dignarse a contestar la pregunta de un corresponsal extranjero o cuando navega en un yate. Es fácil ver por qué los que vivieron en el período de Ceausescu bullían cada vez que él abría su boca o los saludaba con desdén desde la parte de atrás de un vehículo en movimiento. Hasta que un día, luego de un largo, largo período, el pueblo tuvo algo que decir.” Noel Murray. AV Club
“Andrei Ujica hizo un documental sin una narración en off o ‘talking-head’ de ningún tipo, sin títulos de introducción para los personajes principales, sin carteles que pongan en contexto. Es un filme que se estructura en torno a una ausencia, aunque la figura central está constantemente presente. Cuanto más avanza este complejo y –en gran medida– lineal coro de imágenes y sonidos, más se pronuncia esta sensación de ausencia. Gradualmente, nos damos cuenta de que no es solo la ausencia de referentes sino también la Historia en sí misma: si el siglo XX, tal como se representa en los medios, es una historia de la manipulación, la Autobiografía de Nicolae Ceausescu es una catalogación inteligente de elisiones, un himno astuto a la importancia de los registros públicos.” Michael Koresky. Reverse Shot
Dijo la prensa argentina: Autobiografía de Nicolae Ceaucescu de Andrei Ujica y Videogramas de una Revolución, de Harun Farocki y Andrei Ujica. En Proa. Blog El Rayo Verde. 02.10.2011 Ceuasescu y la revolución. La Nación (agenda cultural). 23.09.2011 Autobiografía de Nicolae Ceaucescu, de A. Ujica / Videogramas de una Revolución, de Farocki / Ujica – Ramona. 23.09.2011 Ciclo Alan Pauls en Fundación Proa. Carolina Quintana. 18.09.2011 El arte de dejar hablar y escuchar al dictador. Por María Luján Picabea. Revista Ñ. 16.09.2011 La única verdad que mostraba Ceausescu. Por Paraná Sendrós. Ámbito Financiero. 16.09.2011 Se estrena en PROA “Autobiografía de Nicolae Ceausescu”. Escribiendo Cine. 16.09.2011 Cine y política. CulturAR. 15.09.2011 Ciclo de Alan Pauls en Fundación Proa. Por Gabriela Schevach. Juanele. 15.09.2011 Proa Cine. Cuisine & Vins. 15.09.2011 Ciclo Alan Pauls. Red de Museos / GCBA. 15.09.2011 Autobiografía de Nicolae Ceausescu de Andrei Ujica – Ciclo Alan Pauls. Arte en la red. 14.09.2011 Ciclo Andrei Ujica en Proa Cine. Haciendo Cine. 14.09.2011 Proa Cine presenta “Autobiografía de Nicolae Ceausescu” y “Videogramas de una revolución”. Pandorama. 14.09.2011 Ciclo Alan Pauls. Vuenosaires. 13.09.11 Proa Cine. Autobiografía de Nicolae Ceausescu y Videogramas de una revolución. Ramona Web. 13.09.2011
Ceausescu en PROA. Por Horacio Bernárdez. La espada vengadora. 12.09.2011 Ascenso y caída del imperio rumano. Blog another world is posible. Fuente: Página 12/Radar. 11.09.2011 Ascenso y caída del imperio rumano. Por Diego Rojas. Página 12 / Radar. 11.09.2011 Proyectan en Proa dos documentales del rumano Andrei Ujica. Agencia Télam / Yahoo! Noticias / Terra Noticias. 09.09.2011 Proyectan en Proa dos documentales del rumano Andrei Ujica. El Comercial (diario de Formosa, Chaco). 09.09.2011 Ciclo Alan Pauls: Nicolae Ceausescu X 2. Puesta en Escena .com.ar. 09.09.2011 Andrei Ujica por dos. Otros Cines. Septiembre 2011
Todos los sábados hasta el 8 de octubre, el crítico y escritor Alan Pauls presenta los filmes Autobiografía de Nicolae Ceausescu de Andrei Ujica y Videogramas de una revolución, codirigido por Ujica y Harun Farocki.
PROA TVregistró la primera exposición de Alan Pauls en el Auditorio. Las próximas presentaciones son los sábados 24 de septiembre, 1º y 8 de octubre, en diferentes horarios (ver programación).
Un registro de una de las presentaciones que el crítico y escritor Alan Pauls realiza desde el pasado sábado 30 de julio, en el marco de las proyecciones de Noticias de la Antigüedad ideológica: Marx – Eisenstein – El capital (2008), del cineasta y escritor alemán Alexander Kluge.
Alan Pauls volverá a presentar el filme este sábado 13, a las 18:30 hs. El ingreso al Auditorio de Proa para presenciar su ponencia es libre, previa reserva de ubicación en Recepción.
Goethe-Institut y Fundación Proa presentan Paradojas de la sociedad de cambio (183 min) la tercera parte de Noticias de la Antigüedad ideológica: Marx – Eisenstein – “El capital“, el documental del director y escritor Alexander Kluge que retoma el ambicioso proyecto de Sergei Einsenstein y James Joyce de filmar la obra cumbre de Marx.
El sábado 13 de agosto a las 15 hs. el tercer capítulo de los tres que componen el filme original, de más de nueve horas de duración. A las 19 hs., se podrá ver la versión abreviada de 84 minutos realizada por Kluge para la televisión alemana. “Maratón Kluge”, el sábado 20 de agosto, programará el documental completo y en continuado desde las 11 hs.
A las 18.30 hs., el escritor Alan Pauls presentará la obra de Kluge.
PROGRAMA III PARADOJAS DE LA SOCIEDAD DE CAMBIO – Sábado 13 de agosto, 15 hs.
Vivimos en una SEGUNDA NATURALEZA. De eso habla Marx. Esta naturaleza social ha sufrido, al igual que la biológica que investigaba Darwin, una evolución. Pero en esta transformación social la mayor parte de las cosas están al revés: los perros no intercambian huesos; los hombres de la sociedad moderna obedecen el principio del intercambio. ¿Cómo leer El capital? ¿Qué es el valor de cambio? ¿Acaso Marx debería haber seguido escribiendo libros, por ejemplo sobre la economía política del valor de uso, la economía política de la revolución o la economía política de la fuerza de trabajo?
Capítulos PROGRAMA III
1. La teoría de la guerra relámpago de Karl Korsch.
2. Barcos en la niebla. Con Sophie Kluge y Gabriel Raab.
3. La concierge de París. Con Ute Hannig.
4. Sobre la génesis de la estupidez. De: Dialéctica de la Ilustración, de Marx Horkheimer y T. W. Adorno.
5. El maquinista Hopkins. Ópera industrial de Max Brand del año 1929.
6. Durs Grünbein: El hexámetro de Brecht a partir del Manifiesto Comunista.
7. El Marx temprano y el Marx tardío.
8. ¿Cómo leer El capital? Con Oskar Negt.
9. ¡Cuánta sangre y horror hay en el fondo de todas las “cosas buenas”!
10. Introducción forzosa del intercambio.
11. Nunca he visto dos perros intercambiando un hueso. Rainer Stollmann sobre el valor de cambio.
12. Robinsones socialistas de 1942.
13. Joseph Vogl sobre ideología, alienación.
14. La gran cabeza de Chemnitz.
15. La que tenga la mejor música será la película principal. Con Atze Mückert como intérprete de Marx y compositor de música de películas para S. Eisenstein.
Informes y reservas: 4104-1000/1001 / auditorio@proa.org Admisión general: $20 / versión abreviada: $12 / Maratón Kluge (20 de agosto): $20
Niños desde 9 años acompañados por adultos
NOTICIAS DE LA ANTIGÜEDAD IDEOLÓGICA: MARX – EISENSTEIN – EL CAPITAL
Alemania, 2008
Versión completa:570 minutos
Versión abreviada: 84 minutos
Dirección: Alexander Kluge Presentado por Alan Pauls
Admisión para versión abreviada: $12
Admisión general: $20
Admisión MARATÓN KLUGE Sábado 20 de agoso: $20
INFORMES: auditorio@proa.org / 4104-1000 y 1001 Niños desde 9 años acompañados por adultos
Fundación Proa y el Goethe-Institut presentan uno de los documentales más radicales e insoslayables de la historia de la cinematografía occidental: Noticias de la Antigüedad ideológica: Marx – Eisenstein -EL CAPITAL, del cineasta y escritor alemán Alexander Kluge.
El filme retoma uno de los proyectos artísticos más vastos y experimentales de la historia del arte: la idea original, finalmente abandonada, del director ruso Sergei Eisenstein de filmar en 1929 El Capital de Karl Marx con la colaboración del autor de Ulises, James Joyce.
Noticias de la Antigüedad ideológica: Marx – Eisenstein -EL CAPITAL será presentado especialmente por el crítico y escritor Alan Pauls, en tres funciones de tres sábados sucesivos para la versión completa (570 minutos), seguidas en cada caso por tres funciones especiales de la versión abreviada (84 minutos) y una función especial, “Maratón Kluge”, el sábado 20 de agosto desde las 11 hs.
Alan Pauls disertará los días sábados 30 de julio, 6 y 13 de agosto a las 18:30 hs. Sus ponencias podrán ser presenciadas tanto por los asistentes a las funciones de los capítulos de las 15 hs., como por los asistentes a la versión abreviada del filme.
Hasta el momento, el documetal sólo fue exhibido en una única ocasión en la Argentina, presentado en agosto de 2010 por el Goethe-Institut Buenos Aires en versión completa durante una semana en la Sala Lugones del Teatro San Martín.
Estrenado en Alemania en 2008 y proyectado luego en Holanda, Noticias de la Antigüedad ideológica… es considerada la experiencia cinematográfica cumbre de Alexander Kluge, nacido en Alberstadt en 1932, autor de más de 30 películas -entre cortometrajes, documentales y ficciones- y uno de los padres del denominado Nuevo Cine Alemán, movimiento surgido a partir del Manifiesto de Oberhausen, redactado y firmado en 1962. Ese documento fue la plataforma de emergencia de figuras centrales del cine contemporáneo como Win Wenders, Werner Herzog, Rainer Werner Fassbinder y el propio Kluge, cuya obra es señalada por la crítica, en ese contexto, como la de mayor perseverancia vanguardista.
Diálogos filosóficos, fragmentos de ficciones, óperas, conversaciones telefónicas, collages, dramatizaciones, lecturas en voz alta y fotomontajes: Noticias de la Antigüedad ideológica… alberga una variedad de registros concomitante con el régimen audiovisual urdido por Kluge, que a lo largo de las 9 horas y media del documental entrevista, entre otros, a cinco de los intelectuales más importantes de Alemania: Peter Sloterdijk, Joseph Vogl, Oskar Negt, Boris Groys y Hans Magnus Enzensberger.
El Goethe-Institut Buenos Aires y Fundación Proa ofrecen la oportunidad única de atravesar un ensayo cinematográfico de enorme relieve histórico y filosófico.
DETALLE DE LOS PROGRAMAS:
PROGRAMA I EISENSTEIN Y MARX EN LA MISMA CASA – Sábado 30 de julio, 15 hs.
¿Qué es lo que se proponía filmar Eisenstein? Los apuntes de Eisenstein para “cineficar” El capital, de Karl Marx. ¿Cómo se leen y escuchan hoy los textos que Marx escribió hace casi 140 años?: una aproximación ‘de oído’. ¿Qué distingue la Modernidad de la Antigüedad cuando se trata de ideología? El dinero ¿cómo se explicaría a sí mismo si pudiera hablar? ¿El capital puede decir “yo”? Dietmar Dath sobre cuáles son los ejes del gran libro de Marx. Sophie Rois sobre el dinero, el amor y Medea. Para terminar: La reencarnación de Tristán en la piel de los marineros condenados a muerte del Acorazado Potemkin (por Werner Schroeter).
Capítulos PROGRAMA I
1. De los cuadernos de filmación de Eisenstein. Con Heather Mc Donnell (piano), Irmela Roelcke (piano), Hannelore Hoger (oradora), Charlotte Müller, Thomas Niehans (Berliner Ensemble). (15’07”)
2. Proyectos 1927 – 1929. Con la biógrafa de Eisenstein, Oksana Bulgakova. (12’46”)
3. Tres extractos de El capital y de los Elementos fundamentales para la crítica de la economía política. (2’30”)
4. Nominal / real. Montaje en serie. (1’30”)
5. Paisaje con industria pesada clásica. Música: Multiple Personality Disorder, Norm Plastic, The Revenger. (1’40”)
6. El libro de las fuerzas esenciales humanas. Música: Rigoletto de Verdi. (2’10”)
7. Un hombre es espejo del otro. Con Sophie Rois. (2’00”)
8. Lamento de la mercancía sin vender. Música: Ennio Morricone, Wolfgang Rihm, Monteverdi. (3’18”)
9. Máquinas abandonadas por los hombres. Música: Ennio Morricone. (2’11”)
10. Nosotros los habitantes del cosmos. Música: Sozialistisches Patientenkollektiv. (3’26”)
11. Encanto de la Antigüedad. Con Sophie Rois. Música: Jan Czaikowski. Norma de Bellini. (1’22”)
12. “Hacer líquido”. (3’08”)
13. Dos informantes de la STASI se preparan para su misión. (6’45”)
14. Preparación para el examen de oficiales en la Volksarmee. (9’13”)
15. Eran tiempos incómodos. H. M. Enzensberger sobre el año de su nacimiento: 1929. (23’)
16. El capital se refuta a sí mismo. El Viernes Negro: 23 de octubre de 1929. (4’49”)
17. La sobrina nieta de la intérprete de Lenin: “La formación de los cinco sentidos es un trabajo de toda la historia universal”. Con Galina Antoschevskaia. (23’01”)
18. Conversación con Dietmar Dath: El capital, ¿puede decir “yo”? (45’00”)
19. El amor es más fuerte que el cemento. Con Sophie Rois (15’00”)
20. La reencarnación de Tristán desde el espíritu del Acorazado Potemkin. Con Werner Schroeter. (12’)
PROGRAMA II TODAS LAS COSAS SON PERSONAS ENCANTADAS – Sábado 6 de agosto, 15 hs.
¿A qué llamamos fetichismo de la mercancía? El poder delicado y a la vez arremetedor del capital, ¿qué hechizos produce? ¿Por qué los hombres no son dueños y señores de su producción? ¿Qué significa “asociación de productores libres”? ¿Por qué fracasan las revoluciones? ¿Por falta de tiempo o por principio? ¿Qué significa que todas las cosas son personas encantadas? Con una película de Tom Tykwer sobre la enorme riqueza de detalles que aparece en una imagen cinematográfica a medida que uno se interesa por el proceso de producción de las cosas.
Capítulos PROGRAMA II 1. El hombre en la cosa. Un film de Tom Tykwer. (12’)
2. Antorcha de la libertad. (7’25”)
3. El monumento y la tumba verdadera (Das Denkmal und das wahre Grab) (4’85”)
4. Todas las cosas son personas encantadas. Peter Sloterdijk sobre las metamorfosis de la plusvalía. (46’30”)
5. Sonido de ambiente de una lucha laboral que ya no existe. (10’10)
6. Canción de la grúa Milchsack Nr. 4. (2’14)
7. ¿Qué significa “fracasar con buena cara” en la sociedad del riesgo? Con Oskar Negt. (4’50”)
8. Breve historia de la burguesía. Por H.M. Enzensberger. (3‘13“)
9. Las revoluciones son las locomotoras de la historia. Oskar Negt y Alexander Kluge. (4‘15“)
10. La razón es una antorcha. Un artículo de Condorcet, de la Encyclopédie (1’48”)
11. La revolución necesita tiempo. (1’50”)
12. ¿Qué es un revolucionario? Con Joseph Vogl. (8’02”)
13. Adiós a la era industrial. Un episodio con motivo del crac de 1929. (1’40”)
14. La guerra antes que la paz. De la introducción de los Elementos fundamentales para la crítica de la economía política. (15’)
15. Manifiestos de la inmortalidad. Boris Groys sobre los biocosmistas y las utopías biopolíticas en Rusia antes y después de 1917. (8’)
16. Rosa Luxemburgo y el canciller del Reich. (15’)
17. “Creo en la solidaridad”. La activista Lucy Redler sobre la huelga política y la resistencia social. (12’49”)
18. “Reina vapor, emperatriz electricidad”. De Rudolf Kersting y Agnes Ganseforth. (17’)
19. Joseph Vogl sobre la relación subjetivo-objetiva.
20. El trabajador colectivo de Verdún. Con la participación del dinamitero Helge Schneider.
PROGRAMA III PARADOJAS DE LA SOCIEDAD DE CAMBIO – Sábado 13 de agosto, 15 hs.
Vivimos en una SEGUNDA NATURALEZA. De eso habla Marx. Esta naturaleza social ha sufrido, al igual que la biológica que investigaba Darwin, una evolución. Pero en esta transformación social la mayor parte de las cosas están al revés: los perros no intercambian huesos; los hombres de la sociedad moderna obedecen el principio del intercambio. ¿Cómo leer El capital? ¿Qué es el valor de cambio? ¿Acaso Marx debería haber seguido escribiendo libros, por ejemplo sobre la economía política del valor de uso, la economía política de la revolución o la economía política de la fuerza de trabajo?
Capítulos PROGRAMA III
1. La teoría de la guerra relámpago de Karl Korsch.
2. Barcos en la niebla. Con Sophie Kluge y Gabriel Raab.
3. La concierge de París. Con Ute Hannig.
4. Sobre la génesis de la estupidez. De: Dialéctica de la Ilustración, de Marx Horkheimer y T. W. Adorno.
5. El maquinista Hopkins. Ópera industrial de Max Brand del año 1929.
6. Durs Grünbein: El hexámetro de Brecht a partir del Manifiesto Comunista.
7. El Marx temprano y el Marx tardío.
8. ¿Cómo leer El capital? Con Oskar Negt.
9. ¡Cuánta sangre y horror hay en el fondo de todas las “cosas buenas”!
10. Introducción forzosa del intercambio.
11. Nunca he visto dos perros intercambiando un hueso. Rainer Stollmann sobre el valor de cambio.
12. Robinsones socialistas de 1942.
13. Joseph Vogl sobre ideología, alienación.
14. La gran cabeza de Chemnitz.
15. La que tenga la mejor música será la película principal. Con Atze Mückert como intérprete de Marx y compositor de música de películas para S. Eisenstein.
PROGRAMAS I, II y III completos, sábado 20 de agosto desde las 11 hs, en el “Maratón Kluge”.
Dijo la prensa: Marxismo en Proa.La Espada Vengadora. 19.08.11 Con qué se hace el cine. Página 12. 19.08.2011
Cuando los clásicos hablan de nosotros. La Nación. 14.08.11 El Capital. Rayo verde. 11.08.11 Alan Pauls presenta “El Capital” de Kluge en Proa.FM Rock & Pop / Day Tripper. 04.08.11 Cine en la Fundación Proa. Artfornews. 04.08.11
Alexander Kluge: “Filmé El Capital para defender a nuestros chicos de la catástrofe”. Clarín. 01.08.11
Análisis estructural del arte.Perfil / Cultura. 31.07.11
El Capital, por Alexander Kluge.Revista Debate. 31.07.11 La profunda visión de Kluge sobre “El Capital” de Karl Marx. ABC Cultural. 27.07.11 Goethe-Institut y Fundación Proa presentan Noticias de la Antigüedad ideológica….Mirador Nacional. 27.07.11
Fundación Proa presenta “El Capital” de Marx filmado por Alexander Kluge.Revista Archivos del Sur. 27.07.11
El Capital. Ramona web. 27.07.11
Noticias de la Antigüedad ideológica: Marx-Eisenstein-El Capital. Escribiendo Cine. 24.07.11 Otras imágenes. Télam / Yahoo! Noticias. 20.07.11
El llamado El capital de Kluge es menos una película que un proyecto arqueológico. Así como dura nueve horas y media podría durar veinte, cien, dos mil. Es un proyecto, y los proyectos, por definición, no tienen fin. Instauran un tiempo paralelo que separa al artista del tiempo común de la sociedad y se obstinan en preservarlo así, separado, lo máximo que pueden. Ésa es su apuesta utópica. Como los cirujanos, los arqueólogos saben o por lo menos intuyen dónde cavar, pero nunca hasta cuándo ni con qué se van a encontrar. La clave arqueológica de la obra de Kluge está en su título original, Noticias de la Antigüedad ideológica…, casi siempre eclipsado por el nombre propio de Marx y el título del libro que lo hizo célebre. Si Kluge cava y cava es para exhumar y reavivar las huellas apagadas de la historia, de una historia en particular: la historia del marxismo. Y el primer resto con el que tropieza es uno de los emprendimientos artístico-políticos más extremos del siglo XX: el sueño de Sergei Eisenstein de adaptar al cine El capital de Marx. Un proyecto que no llegó casi a nacer, pero del que sobrevivieron unas cuantas páginas de notas que Eisenstein redacta luego de terminar el rodaje de Octubre.
La empresa es demencial. En principio porque Eisenstein elige filmar un tratado de economía política para plantearse un imposible típico de la vanguardia histórica: ¿cómo figurar la abstracción? ¿Cómo representar lo irrepresentable? Pero es demencial, además, porque en 1927 Eisenstein está chiflado. Octubre —la superproducción que lo convierte en una especie de Cecil B. de Mille de la revolución bolchevique— amenaza con liquidarlo. Tiene que reducir a dos mil metros de película los casi cincuenta mil que filmó y tiene que hacerlo en tiempo récord, en una moviola precaria donde las imágenes apenas se ven. Con los días se va quedando ciego. No duerme. Se hace adicto a las anfetaminas. En ese estado límite —¡y con el Ulises de Joyce, otro ciego, como brújula!— concibe la adaptación de El capital. Chiflado o no, tiene su lógica: después de Octubre, un film que moviliza como nunca antes todo el dinero, los medios y las fuerzas de una sociedad que se piensa a sí misma como un más allá, ¿qué otra cosa puede filmar si no lo que sólo se le ocurriría filmar a un demente: el más allá del cine?
Hay mucho de esa energía insana, alucinatoria, en el film de Kluge. Por lo pronto, la decisión de disolver todas las formas reconocibles del cine —incluso las más reflexivas: el documental, por ejemplo, o el ensayo cinematográfico— en una suerte de monólogo interior desaforado, a la vez incontinente y estricto, articulado sobre la base de dos lógicas acostumbradas a sacarse chispas: la asociación libre (Joyce, el surrealismo, el psicoanálisis freudiano) y el montaje de ideas (Eisenstein, Benjamin, Brecht). Pero en esa alianza más o menos tortuosa se funda, a fin de cuentas, la gran operación de conocimiento que Kluge sigue reivindicando como constitutiva de la cultura marxista: reponer las conexiones complejas y múltiples que enlazan la fenomenología de la vida cotidiana con los procesos de producción. Ir, digamos, en un encadenamiento vertiginoso, de los agujeros que afean las medias de una chica pobre que camina por una calle de Berlín a las axilas de las trabajadoras indias donde se incuban los capullos de la seda.
Por lo demás, todo es posible, todo entra en el “stream of consciousness” marxista que pone en marcha Kluge: la entrevista erudita y el “reenactment”, el chiste y el archivo, la parodia cantada y la teatralización, el shock tipográfico y la glosa pormenorizada de la imagen, la ópera, el cine mudo, el lied, el concierto, la película dentro de la película, la charla telefónica. Es lo que Hans Magnus Enzensberger —uno de los numerosos prodigios alemanes que Kluge entrevista largamente en el film— llama, hablando de Eisenstein, “el método ballena“: una pulsión de acumulación omnívora, que se alimenta de todo y no jerarquiza nada, un poco como la que obedecen los arqueólogos en el primer momento de la excavación, cuando acomodan a un costado el botín de incongruencias que acaban de rescatar: un piecito de bronce, las sobras de un códice, una cucharita, una moneda, un húmero, un trozo de tela o de vasija.
¿Qué clase de resto es El capital? ¿Qué tipo particular de antigüedad ideológica es el marxismo? Nunca explícitas, ésas son las preguntas fantasma que rondan la película de Kluge. Si hay algo que no las responderá, da a entender el director, es un museo del marxismo, no importa lo atinado y ecuánime e ingenioso que sea. El modelo de Kluge es más bien el del yacimiento, la excavación, esa cantera de la que a lo largo de nueve horas y media van saliendo las cosas más familiares y más extrañas que nos haya tocado ver en mucho tiempo. Si las noticias con las que Kluge vuelve del más allá ideológico se parecen mucho a mensajes que vienen del futuro (y la Historia, por lo tanto, a un “déjà-vu” de la ciencia-ficción), es porque la tarea del cineasta arqueólogo —el mensajero, el que enlaza tiempos dispares; es decir: el revolucionario— consiste no en deletrearlas, ni traducirlas, ni explicarlas, sino simplemente en arrancarlas de la tierra y acogerlas, darles un lugar para que se desplieguen, se expandan, entren en contacto y se vuelvan otra vez radioactivas.