Dibujo,1948. Lápiz sobre papel. 22,8 x 14,3 cm
Dibujo, 1949. Tinta china sobre papel. 27,7 x 16,4 cm
Dibujo, 1951. Lápiz sobre papel. 34 x 27 cm
Sin título, 1953. Lápiz sobre papel. 10 x 22 cm
Humeante, c. 1955. Acuarela sobre papel. 14 x 8 cm
Figura, 1956. Pastel sobre papel. 36 x 19,6 cm
Sin título, 1961. Témpera sobre papel. 12,6 x 8,2 cm
Sin título, 1965. Collage sobre papel. 31,6 x 24,2 cm
Sin título, 1980. Óleo sobre papel. 16 x 25 cm
Personaje, 1982. Lápiz sobre papel. 20 x 13 cm
Sin título, 1982. Lápiz sobre papel. 16 x 12,5 cm
Sin título, 1988. Lápiz sobre papel. 12,5 x 16,5 cm
Sin título, 1991. Lápiz color sobre papel. 73,5 x 50,5 cm
¿Y para dónde miro?, 2006.
Impresión en vinilo sobre pared. 80 x 60 cm. Plotter sobre pared. 2012. Dimensiones variables
Desde distintas estaciones de la historia y características personales, las obras de Aizenberg y Avello coinciden en su pasión por la belleza y la perfección, comparten un agudo sentido estético y un excepcional refinamiento formal. Las líneas y franjas y el uso de una cierta bruma que baña la pintura de Avello, remiten a las geometrías líricas y a los “humeantes” de Aizenberg.
De la serie Cityscapes, 2009-2012
Impresión en vinilo sobre vidrio, tres imágenes. Dimensiones variables
Arquitectura y paisaje urbano, interior y exterior, transparencia y superposición. Trabajo en relación con los espacios mentales provenientes de paisajes o escenarios de relatos y filmes de ciencia ficción, vinculando problemáticas y poéticas que me inspiran las obras de Aizenberg. El gran tamaño permite experimentar una sensación de irrealidad y enfatizar este paisaje de extrañamiento.
La ciudad invisible, 2012
Video y pintura sobre pared. Dimensiones variables
En el rincón más íntimo de toda pintura existe una ciudad. Los mecanismos y engranajes necesarios para su funcionamiento son de carácter sumamente misterioso; esta obra no pretende descubrirlos, sino adentrarse en ese misterio. Situada en un lugar fronterizo de lenguajes, la pieza propone un viaje en el tiempo, una hipotética desviación en el universo de Aizenberg.
Tres Torres (fantasma, cripta y cuerpo), 2012.
Instalación compuesta por una columna octogonal escalonada, una puerta con marco y cerradura, y una pintura al óleo sobre cobre. Medidas variables
Remake de una de las torres de Aizenberg, salvo que en esta pintura la torre se ha fugado dejando a su fantasma en el paisaje despojado. A su lado la puerta con silueta de torre “aizenberguiana” encierra su secreto detrás de una clave formal, esta es la cripta. La columna, la tercera torre, extiende el campo gravitatorio y es el cuerpo, el monolito, el guardián.