S/T, 2011. Acrílico sobre mylar calado, 12 x 3,6 m.
“Hay un hueco vertical que atraviesa todo el edificio de la Fundación Proa desde la lucarna de la terraza hasta la recepción, alrededor del cual se desarrolla la escalera principal. Mi propuesta consiste en instalar un gran paño de mylar transparente (14 x 3,70 m.), calado y parcialmente pintado en ese espacio, evidenciando la altura total del edificio y su circulación. El calado nunca puede ser visto entero, sino que lo encontramos a medida que se recorre el edificio: en la recepción, al salir de la librería, desde el café en la terraza y también en los tres tramos de escalera. Es transparente, de manera que se activa con la luz natural de cada ambiente, y está pintado de manera atomizada. Sólo pequeños fragmentos para que el plano sea visible. El motivo del calado es deliberadamente decorativo y su color conspicuo, evitando cualquier empaste con los materiales del edificio. Que sea flotante, brillante, vacío, luminoso, veraniego y refrescante.” Manuel Ameztoy
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CV
Nacida en La Plata en 1973, vive y trabaja en Buenos Aires. Desde 2001, ha presentado sus trabajos en Buenos Aires, Rosario, Bahía Blanca, Miami, Los Ángeles, Milán y Santiago de Chile. Su obra forma parte de colecciones privadas en Argentina, Brasil, Estados Unidos (Miami, Nueva York, Washington, Nashville y Los Ángeles) y Europa (París, Londres, Ginebra, Lisboa, Marsella y Milán). En el ámbito público, está presente en las colecciones del Museo de Arte Contemporáneo de Rosario y el Museum of Latin American Art de Los Angeles. Es profesor adjunto en la cátedra Proyectual I-V, prof. Elsa Soibelman, Instituto Universitario Nacional de Arte (IUNA) desde 2003. Forma parte del equipo docente de la Escuela de Proyectos, Galería Isidro Miranda. Entre 2002 y 2005 estuvo a cargo del Departamento de Educación de la Fundación Proa. Es profesor nacional de Artes Plásticas egresado de la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón (1997). Ha realizado estudios de grabado experimental en la E.N.A.P “San Carlos” en México DF. (1995)
Onomatopeyasvisuales, 2011. Vinilo, medidas variables
“Mi intervención en Proa pretende aludir leve pero inconfundiblemente al cómic. Desde lejos, bien lejos, desde la autopista por ejemplo, Proa parece una cajita blanca en medio de muchos otros objetos de variadas formas, estados y colores. Esa cajita blanca sólo puede contener un tesoro, y como en los cofres: brillo con líneas cortas y puntitos blancos, todo tendiendo a redondo. Si vamos hacia allá y nos metemos en la cajita blanca, descubrimos que el tesoro ya fue saqueado, o quizá es sólo eso, en algún que otro rincón algo redondo o regordete que brilla.” Ernesto Ballesteros
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Nacido en Buenos Aires en 1963. Obtuvo importantes premios, entre los que se destacan el Premio Leonardo a la Joven Generación, el Gran Premio de Honor de Pintura Federico Lanús (Fondo Nacional de las Artes), Medalla de plata Premio Gunther, Primer Premio Chandon, premio Jorge R. Brest de la Universidad de Palermo, Primer Premio de la Fundación Andreani y la medalla de oro del Premio Siemens. Realizó numerosas muestras colectivas e individuales, entre las que se destacan las de la galería Ruth Benzacar de Buenos Aires (galería de la cual es artista), Nara Roesler, de San Pablo, en la fundación Civitella Rainieri (Italia), Argentinian Project en Art Miami Basel y Expansive links, Houston, USA, ente muchas otras. Han escrito sobre él los críticos Edward Shaw, Jorge Glusberg, Alicia de Arteaga, Fabián Lebenglik y Ana María Battistozzi, entre otros.
S/T, 2011. Intervención. Cinta metalizada sobre espejo y puertas. Medidas variables
“Tres elementos propios del lugar se me impusieron como desencadenantes del proyecto: por un lado, la ubicación periférica del espacio; por otro, la tenue iluminación del tubo, y, por último, el brillo del enorme espejo. ¿Cómo podía intervenir tal belleza? La dirección fue clara: revelarla a los ojos de los demás sin que perdiera su esencia y a la vez que se muestre como un espacio nuevo, ambiguo si se quiere.”
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“Nací en Neuquén, pero vivo y trabajo en Buenos Aires. Cuando cumplí un año, mi madre me regaló un equipo de audio. Estudié música concreta desde chico, plástica y varios años filosofía, pero no terminé la carrera. Mi primera muestra la realicé en la galería Belleza & Felicidad en el 2003. Participé de diversas muestras, en el país y el extranjero. Expuse en galería Ruth Benzacar, galería Braga Menéndez, galería Mite, Centro cultural Borges, Fondo Nacional de las Artes, MAC (Salta), Centro Cultural Parque España (Rosario), Sala SOSUNC (Neuquén), Embajada Argentina en Río de Janeiro, entre otros. Obtuve beca de Fundación Antorchas (2002-2003) y participe del programa de artistas de la Universidad Di Tella (2010). Me gusta alternar mi obra con los trabajos de vestuario y arte para bandas de rock, desfiles y producciones de moda; como así también para las imágenes y comentarios que subo a mi Facebook y la pista de baile con amigos.” Ariel Mora
Una serie de instalaciones, 2011. Cintas adhesivas blanca, amarilla, negra y gris sobre vidrio. Medidas variables
“Un par de años atrás, en pleno proceso de producción, se me ocurrió, casi como un acto de autovandalismo, tachar definitivamente algunas obras. Lo logré, con éxito: quedaron bien tachadas con cruces y diagonales que las atravesaban de punta a punta desde sus extremos. Me interesó como tema: la negación, la obturación, la no permeabilidad, encriptar aún más la visión sobre lo que hacía, la imposibilidad de ver. En una segunda oportunidad, donde estas ideas aún no se definían del todo, con motivo de una muestra personal en el Centro Cultural Recoleta (sala C), apareció una pared encerrada por un largo pasillo como parte de la sala, con un respaldo completamente negativo. Mi decisión fue inmediata: tacharla. Llevé la X a formato mural y lo que sucedió en realidad es que había ocupado esa pared, en un acto de negación y afirmación simultáneos, de abandono y apropiación, desobedecer y observar. Me pregunto por qué algo que está tachado, prohibido, siempre nos atrae y nos invita en lugar de alejarnos. Me imaginé un paisaje que no miramos más tachado: ¿quién podría resistirse a no mirar nuevamente ese lugar, mirarlo con una nueva forma de ver, desde otro lugar? Volver a mirar. ¡Cerrar los ojos y volver a mirar! Las grandes ventanas vidriadas de Proa me tientan a probar esta experiencia, la tercer etapa de este proceso.
La X, además, evoca las construcciones de estructuras metálicas de gran porte, puente, galpón, fábrica.
Comencé a pensar a partir de la X en lo que no sucedía en mis construcciones de planos ortogonales, intuí la posibilidad de que la deconstrucción del plano en partes divisibles se conformara desde la descomposición de los lados, atravesar los lados, ocupar el plano, ocupar la línea, develar el método constructivo desde el cual procedo, dejando la línea como evidencia.” Andrés Sobrino
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Nacido en Tucumán en 1967. Actualmente reside y trabaja en Buenos Aires. Estudió Arquitectura en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), Comunicación en la Universidad del Salvador y es docente de la carrera de Diseño Gráfico de la UBA. Actualmente, desde Simplestudio, desarrolla trabajos de identidad institucional, multimedia y editorial para entidades culturales, museos, galerías de arte y empresas. En el transcurso de su búsqueda estética como artista plástico, ha participado en numerosas exposiciones: Centro Cultural Ricardo Rojas, La Casona de los Olivera, Malba, Fundación Klemm, MK galerie (Rotterdam), Fundación Proa, Fundación Telefónica, Museo Provincial de Bellas Artes (Tucumán), Braga Menéndez Arte Contemporáneo, Galería Nara Roesler (San Pablo), VVVgallery (Madrid), Centro Cultural Recoleta, Museo Geométrico de Arte Construido, Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino/Macro (Rosario), Museo Provincial de Bellas Artes "Rosa Galisteo de Rodríguez" (Santa Fe), Museo de Arte de Tigre – MAT, Museo Caraffa (Córdoba), Alejandra von Hartz Gallery (Miami) y Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti.